Prejuicios y discriminación dejan al quechua en desuso

imagen-quechua-014Centenares de peruanos de distintas provincias donde se habla fluidamente el runasimi, dejan de expresarse en su lengua de origen cuando migran a ciudades como Arequipa para evitar ser maltratados.

Julia Félix Rosales tiene 48 años, hace 6 meses viajó 522 kilómetros desde Apurímac para llegar a Arequipa y estar junto a sus 5 hijos. Desde que llegó sale muy poco de casa, debido a que cuando habla muchas personas no la entienden o simplemente la ignoran. Julia habla quechua.

«En mi pueblo todos hablamos quechua, es nuestra forma de comunicación», dice tímidamente. Los prejuicios y la discriminación han hecho que el quechua vaya quedando en desuso.

Lorenzo Colque Arias, presidente de la Academia de Lengua Quechua de Arequipa, señala que en la región más del 50% de la población se comunica a través del quechua, sin embargo al llegar a la ciudad las personas se sugestionan y empiezan a dejar de lado su idioma materno.

«El habitante arequipeño es muy agresivo cuando escucha a una persona hablar en quechua, lo margina, lo discrimina, y lo peor de todo es que esa misma persona sabe hablar y entiende perfectamente el idioma, es un migrante ya radicado en la ciudad y ahora ya discrimina», dice Colque Arias.

El runasimi o quechua se extendió por todo el Imperio del Tahuantinsuyo. Según cada región del Perú, el quechua a adoptado diversos dialectos que cambian algunas palabras, pero el significado sigue siendo el mismo.

«El idioma cambia por la forma de vocalizar, de acuerdo a cada dialecto regional. Por ejemplo en Cusco se dice Sacha Inti y en la selva dicen Sacha Inchi, su significado es el mismo, maní del monte», explica Colque Arias.

En Arequipa, sobre todo en el lenguaje «loncco», muchas de las palabras que se utilizan provienen del quechua, como quetimbear, que significa saltar de lado a lado.

Obligatorio

Julia Vera Amésquita, profesora de educación superior y especialista en lengua quechua, indica que ahora los profesionales deben aprender quechua.

«El artículo 45 de la Ley Universitaria (30220) es explícita al mencionar que todo profesional debe saber de preferencia su lengua nativa o inglés. Y no creo que un profesional vaya a hablar inglés en un pueblo alejado», señala.

A ello se suma que el Estado ha implementado la Oficina de Educación Intercultural Bilingüe dentro del Ministerio de Educación, con la cual se da incentivos (bonos) a los maestros que hablen el idioma.

Oportunidad laboral

Pese a que el quechua en la ciudad va perdiendo su valor, en varias zonas mineras es indispensable hablar esta lengua.

«Las mineras prefieren a la persona que habla quechua debido a que hay una mejor comunicación con la población del sector», dijo Lorenzo Colque. Aprender quechua cuesta en promedio S/. 70 mensuales.

«En 9 meses se puede aprender bien el idioma y salir con título de traductor intérprete», dice Julia Vera, promotora del CETPRO Yachay, donde al igual que la Academia de la Lengua Quechua, se enseña el idioma.

El quechua en la currícula escolar

El profesor Alcides Prieto Delgado es otro de los incansables precursores para que el quechua no desaparezca. Ha trabajado en varias provincias de la región y desde ahí busca que el idioma se introduzca en la currícula educativa.

«Si bien es cierto el inglés es importante, lo es más aún aprender el runasimi, es nuestra lengua, nuestra cultura, el Estado se ha olvidado de incentivar en los colegios su enseñanza», dice.

Mientras pasea por los mercados y las calles de la ciudad, siempre hablando en quechua, Alcides Prieto se siente muchas veces decepcionado por la reacción de algunas personas, sin embargo hay otras que entablan un amable diálogo con él, sin embargo solo es un chispazo, porque después todo sigue igual, el castellano recobra su lugar.

En las regiones de Apurímac, Arequipa, Ayacucho, Cajamarca, Cusco y Puno son donde mayor cantidad de gente quechuahablante se concentra, cada una de las cuales tiene matices particulares.

Fuente: La República

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